Un análisis del libro «América Latina: La visión de sus líderes» : Opinión del Canciller de Paraguay, Rubén Ramírez

Por Rubén Ramírez Lezcano*

Ha llegado a mis manos el libro “América Latina La Visión de sus Líderes”, escrito por mi amigo y ex colega Andrés Rugeles, en cuya lectura quedé inmerso por su genial enfoque de las fortalezas, oportunidades, y a la vez, desafíos y amenazas de América Latina, con el especial aporte de las ideas de representativos exponentes de la vida latinoamericana, entre ellos, jefes de Estado, expresidentes, responsables de organismos internacionales, experimentados diplomáticos, políticos, analistas e investigadores, cada uno desde su perspectiva individual, apostando al objetivo de contribuir a una Latinoamérica protagónica, consiente de sus vulnerabilidades y potencialidades, pero rectora de su futuro.

Partiendo de análisis multifocales y pluridimensionales, la nutrida y diversa contribución, sin duda, será oportuna y útil en este momento crucial de la humanidad, por lo que, no me resta sino recomendar su lectura, augurando que su excelente contenido ricamente propositivo, estará muy por encima de cualquier expectativa.

Al inicio de casi 1.000 páginas, el libro recoge la visión de largo plazo para América Latina de la Universidad de Oxford, cuya tradición en estudios interdisciplinarios se remontan a 1964, con la creación del Centro de América Latina (LAC).

En su opinión, el proyecto concretado con esta publicación se aproxima de una manera holística a la región, desde los ejes de pobreza y desigualdad; crecimiento y productividad; medio ambiente; democracia; integración regional; e inserción internacional. Valora además el número importante de entrevistas a líderes latinoamericanos, así como la serie de artículos académicos preparados para esta ocasión por expertos y autoridades en cada tema.

Concluye en la certeza de que este trabajo contribuirá a la reflexión sobre el futuro de la región, así como a reafirmar la necesidad de avanzar con visión de largo plazo y pragmatismo en el desarrollo incluyente y sostenible, la integración y el fortalecimiento de sus instituciones y valores democráticos.

A su vez, la Unidad del Sur Global (GSU, por sus siglas en inglés), centro descentralizado de estudios, investigación y docencia vinculado al Departamento de Relaciones Internacionales de la London School of Economics and Political Science (LSE), cuyo objetivo es investigar el papel cambiante del Sur en la configuración del orden mundial, también destaca que esta publicación se constituye en un valioso aporte al estudio de la región en el concierto internacional e ilustra sobre los retos que está enfrentando el Sur Global en materia de desarrollo sostenible, democracia, fortalecimiento institucional, inserción global, así como las rutas a seguir en el futuro.

En el prólogo, Enrique García, recordado ex presidente ejecutivo y propulsor de la CAF, también subraya que el libro contiene un importante número de entrevistas y artículos de expresidentes y altas autoridades de América Latina, líderes y principales ejecutivos de organismos multilaterales, destacados académicos y representantes de medios de comunicación, sobre temas centrales de la nueva época que vive el mundo.

Agrega al respecto, que más allá́ del impacto negativo que ha tenido la pandemia del Covid-19, y que aún se manifiesta en procesos inflacionarios y de reducción de los ritmos de crecimiento económico en escala global, la nueva época se caracteriza por el acelerado avance de la Cuarta Revolución Industrial, la creciente urbanización, el calentamiento global y el dramático incremento en las brechas económicas y sociales que separan regiones, países y originan división al interior de estos. Asimismo, señala que existe un contexto geopolítico internacional caracterizado por las tensiones y rivalidades entre Estados Unidos y China, la creciente relevancia del Sur Global, el impacto geopolítico de la invasión de Rusia a Ucrania, el conflicto en el Medio Oriente y el aumento del narcotráfico y las redes de crimen organizado, así como del notorio debilitamiento del multilateralismo y un menor apoyo al libre comercio y la globalización, concluyendo que, si a las anteriores tendencias se añade el preocupante desapego de las nuevas generaciones con las instituciones y valores de la democracia, no hay duda de que existe un complejo escenario global que, desde la perspectiva regional, debe ser debidamente evaluado.

En su opinión y en línea con lo anterior, el libro da una importante señal de que las debilidades estructurales e institucionales existentes en el campo económico, social y ambiental deben ser reconocidas con realismo y humildad por gobiernos, instituciones, clase política y sociedad civil en su conjunto. Lo anterior, como paso previo para lograr la construcción de consensos que permitan la elaboración de estrategias con un enfoque holístico, donde el mantenimiento de equilibrios macroeconómicos se convierta en la plataforma necesaria sobre la cual se pueda diseñar el conjunto de medidas encaminadas a disminuir y, eventualmente, cerrar las brechas existentes en ingreso per cápita, productividad, competitividad, comercio, pobreza y equidad social, aspecto este último en el que América Latina es la región del mundo con la peor distribución del ingreso (coeficiente Gini).

Al concluir su análisis, García indica que es muy importante que los países replanteen en forma realista, pragmática y no ideologizada las estrategias de integración y cooperación regional, encaminadas a lograr una inserción internacional inteligente y que no hay duda de que un enfoque de esa naturaleza es vital para que la región acelere su desarrollo tecnológico, impulse los encadenamientos productivos y diversifique, tanto su comercio como las fuentes de captación de recursos financieros externos, y todo lo anterior, para lograr una participación e influencia mayor en el escenario global. Sin embargo, recuerda que para avanzar de manera efectiva en una estrategia que se enmarque en los objetivos y criterios descritos anteriormente, una condición necesaria es que exista un firme compromiso de los líderes de los países con la urgencia de fortalecer la institucionalidad democrática, y con ese objetivo, la separación de poderes, la clara definición de los roles de los sectores público y privado, así́ como la existencia de políticas y normas consistentes y duraderas, son componentes esenciales.

Compartiendo el prólogo, el excanciller colombiano Guillermo Fernández de Soto resalta que este proyecto culmina entregando a los académicos, los empresarios, la sociedad civil, los gobiernos de la región y del mundo, y las instituciones multilaterales, lo que será sin duda un referente en el análisis y la evaluación de los desafíos que enfrenta América Latina para lograr un mayor desarrollo e inserción global, como uno de los grandes actores de la política internacional.

También considera trascendental esta obra, por su perspectiva multidimensional e integral que se refleja en los temas tratados y en su estructura, recogiendo la experiencia del autor bajo el prisma no solo de su formación académica, sino también de su trayectoria en política exterior, integración regional y banca multilateral de desarrollo.

El excanciller Fernández de Soto expone que hoy asistimos a eventos que dejaron de ser el resultado de una visión unilateral de la geopolítica para convertirla en unos elementos multifuncionales y multipolares, en aspectos como el medio ambiente, los desastres naturales, la lucha contra el terrorismo, el problema mundial de las drogas, la promoción y defensa de los derechos humanos, la salud pública, el combate contra la pobreza, un nuevo tratamiento para las migraciones internacionales, entre otros, por lo que este trabajo de investigación es un aporte significativo para entender mejor el mundo de hoy y el rol de América Latina.

Sostiene la necesidad de un multilateralismo renovado y del estricto apego al Derecho Internacional para la construcción de un nuevo orden más equitativo basado en reglas, en el entendimiento que los problemas mundiales de hoy exigen instituciones, ciudadanos y soluciones globales, bajo la premisa de no dejar a nadie atrás.

Por ello es que los países de América Latina han reafirmado una y otra vez la importancia que tiene la Organización de las Naciones Unidas y la necesidad urgente de su reforma, incluyendo el Consejo de Seguridad, para contribuir de forma efectiva a la resolución de los principales problemas mundiales y regionales, enfoque que exige persistencia y coherencia en el tiempo, así como esfuerzos de largo aliento, con el ánimo de profundizar la agenda multilateral en torno a una mayor cooperación y solidaridad.

Comparto el enfoque de que la integración regional, más que una opción, es una necesidad y un imperativo, siendo la mejor estrategia para nuestra inserción positiva en un mundo globalizado, con un enfoque multidimensional que no solo se limite a los asuntos económicos, sino también a los temas sociales, la democracia, la política exterior, la integración física y el desarrollo fronterizo, la institucionalidad, entre otros.

En la introducción general, el libro refleja el más profundo anhelo de responder a la pregunta “¿Hacia dónde va América Latina?”, partiendo del hecho innegable de ser una región de complejidad, diversidad y heterogeneidad inigualables.

Con la riqueza de los elementos aportados en las intervenciones antes mencionadas, esta obra recoge, a lo lardo del desarrollo de 12 ejes temáticos, la invalorable contribución aportada por personalidades altamente representativas de América Latina, con su impronta personal y experiencia, sobre las temáticas más trascendentes para el desarrollo de nuestra región.

En materia de pobreza y desigualdad, expresan sus opiniones los expresidentes de Chile, Michelle Bachelet sobre “Una sociedad más justa, inclusiva y sostenible” y, Leonel Fernández, expresidente de República Dominicana, sobre “El gran dilema es reducir nuestra dependencia”.

Sobre crecimiento verde, digital e incluyente, Mauricio Macri, expresidente argentino, titula su intervención “Una región en busca de libertad”. Por su parte, y tal vez como contribución póstuma, el expresidente chileno, Sebastián Piñera, expone sobre “Construir y fortalecer los nuevos pilares del desarrollo”. El exvicepresidente boliviano Jorge Quiroga, sostiene que “El pecado capital del desarrollo es la oportunidad desperdiciada” y a su vez, Luis Alberto Moreno, expresidente del Banco Interamericano de Desarrollo, declara “Soy de los optimistas”.

Respecto del Medio Ambiente, se efectúan importantes valoraciones. Iván Duque, expresidente de Colombia, con “La acción climática no es ni de izquierda ni de derecha”; Alicia Bárcena, exdirectora general de la CEPAL y hoy Canciller de México, expone sobre “América Latina verde, progresista y feminista”, sumándose igualmente Marisol Argueta, excanciller de El Salvador, con su visión de “Transformar los compromisos en planes y acciones concretos”.

En torno a la Democracia, Laura Chinchilla, expresidente de Costa Rica, opina sobre “Incertidumbre con oportunidades”, Ricardo Lagos, expresidente de Chile, menciona que “Se siguen ‘chuteando’ para adelante los problemas de hoy”. Andrés Pastrana, expresidente de Colombia, advierte que “La democracia en América Latina está amenazada” y Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos, nos define como “Igualitarios, resilientes, pero, fundamentalmente, inteligentes”.

En cuando a la integración regional, Celso Amorim, excanciller brasileño, expresa sus conceptos de “Reconstruir puentes”, mientras que Andrés Oppenheimer, prestigioso columnista internacional, expone sobre “La integración al revés”.

En lo relativo a la inserción internacional, el presidente paraguayo Santiago Peña, sostiene que “América Latina necesita creer en su grandeza, en su destino”; Enrique Iglesias, exsecretario general iberoamericano sostiene que “América Latina es una región privilegiada e indispensable para el mundo”; Rebeca Grynspan, también exsecretaria general iberoamericana, expresa que “Queremos un multilateralismo universal”, incluyéndose además la perspectiva de la conocida periodista Ángela Patricia Janiot, sobre “Un enorme potencial, con grandes dosis de incertidumbre”.

De esta manera, las opiniones de especialistas, autoridades y líderes se van sumando en el desarrollo de las temáticas en materia de economía y finanzas, aspectos sociales, medio ambiente y transición energética, democracia y asuntos políticos, integración y comercio, inserción internacional, dando a la obra riqueza de contenido y variedad.

En la reflexión final, a cargo del autor, Andrés Rugeles, se destaca que en las próximas décadas se experimentarán extraordinarios cambios geopolíticos y económicos; que habitaremos en un mundo multipolar convulsionado por la volatilidad y conflictos regionales, nacionalismos e intentos de limitar la globalización a través del “desacople” y la “fragmentación”. Agrega que el poder se moverá progresivamente del Atlántico al Pacífico, lo cual generará desplazamientos, pero también ganadores y que, en 2060, Asia ostentará más del 55% del producto interno bruto (PIB) mundial. Las nuevas rutas de la seda le permitirán a China ampliar su propia órbita de poder y esfera de influencia global entre Este y Oeste, Asia y Europa.

Con este concepto, debería entenderse la centralidad que tiene el control de recursos y las rutas de comercio, el rol de las innovaciones tecnológicas, los contextos y las motivaciones. Mientras tanto, sostiene el autor, Estados Unidos seguirá siendo una potencia muy importante en el orden internacional. Su rol geopolítico, económico, comercial y financiero no se puede abreviar, lo mismo que su capacidad de generar conocimiento como núcleo de grandes universidades y centros de pensamiento, así como de innovación y transformación en ambas costas.

Adicionalmente, destaca que estaremos bajo una serie de mega tendencias que no se pueden detener y están en curso en materia de cambio climático, las transformaciones demográficas y envejecimiento de la población, la aceleración de la revolución tecnológica y la digitalización, siendo latentes los riesgos de la inteligencia artificial (IA) para la existencia de la civilización humana.

En conclusión, un contenido sin desperdicios por la variedad de las temáticas abordadas, la riqueza de las evaluaciones y la alta calificación de sus exponentes, por lo que me sumo a las numerosas expresiones sobre la gran relevancia y trascendencia de este trabajo para la cuantificación de nuestras realidades de hoy y la definición de tácticas y estrategias de cara a los desafíos del mañana.

*Rubén Ramírez es Ministro de Relaciones Exteriores del Paraguay

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